LAS ROSAS DE SOMERSET

GÉNERO: Narrativa Sentimental

EDITORIAL: Editorial Viceversa, 11/2010

ISBN: 978-84-92819-40-9

TÍTULO ORIGINAL: Roses

TRADUCIDO POR: Manuel Manzano

EDITOR ORIGINAL: Grand Central Publishing, 01/2010

 

Mary Toliver, propietaria de plantaciones de algodón, desearía no haber heredado nunca la gran casa familiar, Somerset. Sabe que vendió su alma por las tierras de su familia y ahora quiere evitarle el mismo destino a su sobrina nieta.

Percy Warwick, miembro de una próspera familia dedicada al negocio de la madera, y Mary estaban profundamente enamorados y deberían haberse casado… pero decidieron no hacerlo. A partir de ahí, sus vidas y las de sus descendientes debieron enfrentarse al engaño, los secretos y las tragedias que nacieron de esta decisión.

Con una diestra e imperturbable voz narrativa, Las rosas de Somerset nos ofrece un lienzo que retrata a tres generaciones atrapadas entre la pasión por su trabajo y el amor.

Una maravillosa saga familiar marcada por el honor y la tradición, que ha sido aclamada por la prensa en Estados Unidos.

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Biografía

Leila Meachan ha vivido en Texas durante toda su vida, excepto para su nacimiento (en Minden, Lousiana) debido a que su padre no pudo conseguir que su madre cruzara la frontera del río Sabine para que ella naciera, y, más recientemente, en cortas estancias que ha vivido fuera de este estado con su marido, militar de la Fuerza Aérea.

Leila se graduó en la Universidad del Norte de Texas con una licenciatura en Artes. Se casó con un piloto de la Fuerza Aérea de los EEUU durante la guerra de Vietnam y ha servido en numerosos trabajos voluntarios como esposa de militar antes de reanudar su carrera docente en San Antonio. Allí ella enseñó inglés en secundaria hasta su jubilación, y fue elegida en dos ocasiones por sus compañeros como "Maestro del año".

Su amor por la escritura llegó tarde, a pesar de que incursionó brevemente con una novela romántica que escribió en los años ochenta y que no esperó que fuese nunca publicada. A ella le siguieron otros dos libros tras los cuales abandonó la experiencia. Retomó la escritura después de su jubilación, cuando se quedó sin cosas que hacer... «y un día me senté y escribí Roses».

Leila lleva casada cuarenta y tres años y no tiene hijos.